¿Bechamel vegetal cremosa y saludable? ¡Sí! ¡Es posible! ¡Te lo explicamos!
Siempre hemos asociado la bechamel a un plato graso y/o de mucha caloría. Además, es bien sabido que en las mesas navideñas que se avecinan podemos encontrar temas alimentarios relacionados con el gluten, lácteos, etc.
Es por eso que, hoy, os queremos explicar cómo hacer una BUENA bechamel vegetal, cremosa y prescindiendo de ultraprocesados de baja calidad.
Sabemos que los principales ingredientes para la elaboración de una bechamel en condiciones «normales» son: mantequilla, harina y leche.
Bien, pues para la versión vegetal optaríamos por: aceite de oliva virgen extra (en lugar de margarina); bebida vegetal a escoger (utilizando la más neutra posible para no alterar el sabor) y sin azúcares añadidos. Si bien es cierto que estas bebidas suelen ser más dulces de entrada, siempre podremos corregir al final añadiendo una mayor cantidad de sal, pimienta y/o nuez moscada. Finalmente, podemos utilizar almidón de maíz o incluso harina de legumbres por su alto contenido proteico, como sustitutos de la harina de trigo.
El espesor de la bechamel la controlaremos con las proporciones de aceite y harina. En caso de quererla más espesa, aumentaremos la cantidad de estos dos ingredientes. Si nos gusta más líquida, podemos añadir más bebida vegetal o incluso caldo de verduras.
Trucos para la cocción: ordenamos las ideas
- Utilizar sartenes o cazuelas antiadherentes y con fondo ancho.
- Calentar primero el aceite de oliva a baja temperatura SIN DEJAR QUE AHÚME, y añadir la harina poco a poco con unas varillas hasta que se transforme en una pasta espesa.
- Cuando conseguimos la pasta espesa, ir introduciendo la bebida vegetal SIN DEJAR DE REMOVER con las varillas.
- Mantener siempre la cocción suave, EVITAR QUE HIERVA para que no se queme.
- Duración aproximada de unos 30 min.
- Pasado este tiempo, añadir los condimentos al gusto: sal, pimienta y nuez moscada.
¿Dudas?
¿Qué ocurre si ha quedado muy líquida?
La podemos dejar al fuego y esperar a que reduzca, o añadir MUY LENTAMENTE un poco más de harina/aceite.
¿Qué ocurre si quedan grumos a posteriori?
Podemos pasar la bechamel pasar por la batidora.
FELICES FIESTAS Y ¡BUEN PROVECHO!